Como abogada de quiebra se cuan importante es el crédito. Mi abuelito decía que el que se viste de lo ajeno en la calle los desvisten. 

La verdad es que cuando utilizamos la tarjeta estamos tomando prestado. El problema no es tomar prestado, el problema son las contingencias diarias que todos tenemos. Todos los días nos levantamos y no sabemos que puede pasar, todos los días tenemos emergencias peque as, gastos inesperados. A veces me molesta la expresión de mi padre de que amigo es un peso en el bolsillo. Esas palabras parecen decir que no se debe tener confianza a los demás, pero la realidad es que demuestra la necesidad que tenemos todos de tener suficiente para comprar la leche o poder echar gasolina al carro para ir al trabajo. Aun cuando es bueno tener amigos que nos den la mano. La realidad es que lo vamos a perder si todo el tiempo tenemos que acudir a estos para poder sobrevivir las peque as emergencias en la vida. Dejemos eso para momentos de verdadera necesidad. Si tomamos prestado estamos obligando nuestros ingresos futuros y tenemos menos dinero para las necesidades de día a día.

 La realidad es que necesitamos usar las tarjetas, pero debemos tener mucho cuidado con ellas. Es muy difícil adquirir bienes caros: como casa, carro sin crédito. En adición, las tarjetas se han convertido en una manera segura y efectiva de realizar pagar cosas que queremos pero no tenemos la totalidad del dinero con nosotros. Pero, son un arma de doble filo. Cada vez que vamos a una tienda nos ofrecen su propia tarjeta de crédito. Eso significa que podemos terminar con mas de 10 tarjetas en nuestra cartera. El problema no es la cantidad de tarjetas, aunque si son demasiadas nos puede afectarnos en la puntuación prestataria. El problema es que es una tentación muy grande, en una sociedad en que se incentiva el consumo como la nuestra. Mientras menos debas, menos preocupaciones tienes.

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